Los recursos de un despacho de abogados

Leo en una entrevista (1) a Tim Brown (Presidente y CEO de IDEO) que «en un mundo en el que la «comoditización» avanza a pasos acelerados, la transferencia rápida de […]

marzo 29, 2010 |

2 min lectura

Leo en una entrevista (1) a Tim Brown (Presidente y CEO de IDEO) que «en un mundo en el que la «comoditización» avanza a pasos acelerados, la transferencia rápida de conocimiento permite que las nuevas ideas y las mejores prácticas estén al alcance de todos. Y el enfoque actual de la gestión, que suele girar en torno a la pregunta «¿cómo saco el mejor provecho de las opciones disponibles?, es un surco difícil de arar. No es sencillo competir cuando tratamos de elegir dentro del mismo conjunto de opciones disponibles para todos«.

A raiz de esta reflexión, me planteo el enfoque actual de la gestión en los servicios jurídicos. Es cierto que la «comoditización» se instala en algunos servicios jurídicos, en los que el resultado es más bien previsible. Pero me han llamado la atención las otras dos reflexiones, que me parecen más complejas.

En primer lugar, que «la transferencia rápida de conocimiento permite que las nuevas ideas y las mejores prácticas estén al alcance de todos» puede ser cierto pero sólo en los servicios de bajo valor para el cliente, es decir, en los que sufren comoditización. No creo que en servicios más complejos que requieren tanto conocimiento como habilidades se transfiera el conocimiento de manera sencilla. Otra cosa es que el acceso a legislación y jurisprudencia se haya simplificado hasta límites hasta hace poco impensables, pero de ahí a transformar ese conocimiento en algo útil para el cliente (verdadera función del abogado) hay mucho más recorrido.

En segundo lugar, es cierto que «No es sencillo competir cuando tratamos de elegir dentro del mismo conjunto de opciones disponibles para todos«. Por eso debemos movernos en ámbitos donde encontremos escasez, que suelen ser más complejos, y no por casualidad. Si competimos sólo con las mismas opciones que están al alcance de todo el mundo, y sumamos el elevado número de abogados existente, el resultado no parece muy alentador.

En definitiva, si todos tenemos las mismas piezas del «lego», el resultado de lo que montemos puede variar, pero será muy similar. Si te quieres diferenciar, busca nuevas piezas, y si no las tiene nadie y son útiles para tus clientes, mejor.

(1) HSM Management, mar-abr 2010

    Si desea recibir un mensaje esporádico, con algunas cuestiones que nos parecen relevantes en el sector legal, suscríbase a nuestro newsletter.

    He leído y acepto los términos y condiciones.